lunes, 31 de julio de 2017

Tailanda, el país de las mil Sonrisas!!

Un enamorado de los viajes nunca olvida el momento en el que empieza a planificar el viaje de sus sueños.... A mi me pasó hace tan solo unos meses, cuando por fin, reservamos nuestros billetes de avión hacia Tailandia. Era el inicio de la aventura con la que había soñado casi toda mi vida....



Tenía muy claro que deseaba un viaje totalmente personalizado, a nuestro aire y no el típico "pack" que suelen ofrecer a todos los turistas, que viajan por primera vez a Tailandia. Así que empecé a leer todo lo que encontré, principalmente las experiencias de viajeros además de estudiarme la historia y geografía del país. Me volví una experta en líneas aéreas tailandesas, en horarios, en rutas, en toda una cultura que quería descubrir.... 

Planificamos nuestro viaje para la última semana del mes junio y viajamos con Etihad Airways. Llegamos a Bangkok, tras unas 16 horas de vuelo y un corta escala en Abu Dabi, cansados pero deseosos de conocer ese bullicioso mundo que nos abría sus puertas. 

Nos alojamos las tres primeras noches en el Hotel Solo Sukhumvit. Hotel cómodo, situado en una calle tranquila pero a pocos pasos de una artería principal, de gran afluencia y donde encontrar todo tipo de servicios (restaurantes, tiendas, acceso a metro, etc.). 

Nuestro primer día en Bangkok empezó sobre medio día y tras una breve pausa en el hotel conocimos a Jack y su "Tuk Tuk"... Sinceramente es la forma más rápida y cómoda de conocer la ciudad. Bangkok no tiene nada que ver con cualquiera de la ciudades europeas que solemos visitar, las distancias son inmensas y sin contar que poca gente suele hablar inglés.... 



Nos movimos en Tuk Tuk hasta el muelle (Central Pier), donde cogimos un barco (con bandera naranja) y recorrimos el río Chao Phraya, mezclándonos con la gente local y empezamos a descubrir la dulzura de su cultura. Una sonrisa nunca faltaba en sus rostros. Todo el mundo fue especialmente atento y amable con nosotros. Nos sentimos inmensamente bienvenidos!! 






Callejeamos sin rumbo fijo y nos dejamos seducir por todo lo que nuestros sentidos fueron capaces de sentir....













Una cosa que nos sorprendió mucho, a parte de la humildad del pueblo tailandés, fue la devoción y respecto que todos los ciudadanos sienten por su actual Rey pero todavía más, por su padre, el Rey Bhumibol Adulyadej, fallecido hace poco más de un año, a los 88 años de edad y tras 70 años de reinado. Era considerado, por su pueblo, como un rey justo y bueno.


Tras un día muy intenso y agotador, regresamos al hotel y decidimos cenar en un restaurante muy cercano, llamado "The Mexican". Hicimos amistad con el dueño, con quien compartimos un rato muy agradable. Todo lo que comimos estaba exquisito!! 

La mañana de nuestro segundo día en Bangkok, lo dedicamos a la visita del mercado flotante...  el cual, según mi punto de vista, se ha vuelto algo "demasiado" turístico"!! Aunque bien se merece una visita... Tened en cuenta que hay casi 2 horas de viaje desde Bangkok.







La tarde del segundo día, lo dedicamos a la vista del Palacio Real, de Wat Pho (El templo del Buda reclinado) y descubrimos el mejor Pad Thai de la ciudad (absolutamente increíble)!!! El helado de coco fue un gran descubrimiento....











El tercer día lo dedicamos al shopping como cualquier otro tailandés. 









Compramos entrada para ver un combate de Muay Thai para esa misma noche. Es algo que no te puedes perder si estás por aquí.....







Tras el combate de Muay Thai, ya solo nos quedaba un paseito, cenar y prepararnos para nuestra siguiente parada: Chiang Mai...






Primer día en Chiang Mai y fuimos recibidos con algo de lluvia, lo cual se agradecía tras el calor de Bangkok. Chiang Mai se encuentra al norte de Tailandia, en una zona de mucha vegetación y donde las lluvias son más habituales que en la capital.









Disfrutamos de unos días de descanso entre naturaleza, templos sagrados y artesania.